Entendiendo la salud como un concepto no ligado únicamente a los servicios de salud, sino en un sentido más amplio como la interrelación con los aspectos ambientales y socioeconómicos, queda claro que el conjunto de valores y principios que orientan el desarrollo de los sistemas de salud es complejo y que los servicios de salud tienen que ser integrados y accesibles, con médicos responsables y capaces de hacer frente a una gran mayoría de las necesidades de atención de salud personal, que desarrollen una relación sostenida con los pacientes, y que actúen en el contexto de la familia y la comunidad, características de los médicos especialistas en medicina familiar.
Responde a estas premisas y necesidades un nivel de la atención sanitario que se encargue de ofrecer a la población, independientemente del sexo, enfermedad, órgano o sistema afectado, el primer contacto, atención longitudinal en el tiempo, integralidad, con una amplia oferta de servicios, los necesarios para atender a las necesidades más comunes de la población, coordinada con el resto de niveles asistenciales y que contemple el entorno familiar, con orientación comunitaria y competencia cultural. Todos estos aspectos están inmersos en la atención primaria en salud.
Hay una perfecta conexión ideológica, estratégica y práctica de la medicina familiar con la atención primaria en salud. Hay evidencia a nivel mundial de que los países con mayor cantidad de médicos familiares en sus servicios de salud, tienen mejores indicadores de salud en su población y disminuyen las tasas de hospitalización y de urgencias.
Desde 1963, cuando la Organización Mundial de la Salud promulga la necesidad de formación de médicos para la medicina familiar, la aparición de la primera residencia de medicina familiar en Escocia también en 1963 y las posteriores residencias en todo el mundo, pasando por Alma Ata en 1978 que define la atención primaria como estrategia fundamental de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, el carácter de implementación obligatoria en los países de la Unión Europea en 1995, Astana en 2018 con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, hasta la Agenda de la Salud Sostenible para las Américas 2018-2030, la medicina familiar es la herramienta clave para el desarrollo pleno de la atención primaria.
Ventajas de la medicina familiar son la cercanía a las personas y a las comunidades, atención a la biografía de cada individuo, mayor interrelación entre médico y paciente, mayor respeto a la autonomía del paciente en la toma de decisiones en salud y enfermedad, alta resolutividad en procesos diagnósticos y terapéuticos y acompañamiento del su entorno familiar.
Evidencia de efectividad en reducción de la mortalidad por todas las causas y mortalidad por enfermedades cardiovasculares y pulmonares, menor uso de servicios de urgencias y hospitales, mejor atención preventiva, mejor detección del cáncer de mama y reducción de la incidencia y mortalidad por cáncer de colon y cervical.
Evidencia de eficiencia en el uso de menos pruebas, mayor satisfacción del paciente, menos uso de medicamentos, menores costos relacionados con la educación, evidencia de equidad, reducción de disparidades en salud en áreas de mayor desigualdad de ingresos, inmunización más completa, mejor control de la presión arterial, mejor salud oral.
Resultados de la sinergia entre atención primaria y medicina familiar son la disminución de la fragmentación de la atención y las complicaciones asociadas, disminución de la mortalidad, aumento de la esperanza de vida, mejoramiento del diagnóstico de enfermedades, mejoramiento del manejo de enfermedades crónicas y disminución de los ingresos y reingresos hospitalarios y en urgencias.
La fortaleza de los médicos familiares se fundamenta en la capacidad de manejar la complejidad, en la atención de los aspectos psicosociales y la capacidad de activación de los pacientes, en el contexto de la atención longitudinal, continua y basada en las relaciones, centrada en la persona, en su contexto familiar, comunitario y cultural, con profunda responsabilidad por la comunidad a cargo.
Además, con responsabilidad por el desarrollo y mantenimiento de las aptitudes, valores y equilibrio personales como base para la prestación de cuidados efectivos y seguros.
La atención primaria en salud es el terreno de actuación fundamental de los médicos de familiares y médicos familiares y comunitarios. La medicina familiar es la herramienta clave para el desarrollo pleno de la atención primaria en salud.