Introducción:

El ozono se considera un potente agente antimicrobiano y por ello se utiliza como terapia complementaria a la cicatrización de las heridas y a la reducción del dolor. Sin embargo, este tema está todavía poco estudiado empíricamente.

Objetivo:

Analizar la capacidad terapéutica de la ozonoterapia como coadyuvante en la cicatrización de heridas y la disminución del dolor.

Métodos:

Estudio exploratorio, transversal y retrospectivo, de carácter descriptivo. El análisis de los datos se basó en la estadística descriptiva e inferencial mediante las pruebas de Mann-Whitney y Friedman (datos continuos) y la prueba de Chi-cuadrado/Fisher (datos dicotómicos u ordinales).

Resultados:

Se incluyeron 20 pacientes, principalmente mujeres (55%) y con una edad media de 61,9 años (±16,7). Un estado más agravado de la cicatrización y niveles más altos de dolor inicial se asociaron con la no cicatrización (p=0,02; p=0,03, respectivamente). En cuanto a la evolución temporal de la cicatrización de la herida y los niveles de dolor (inicio, primer mes, segundo mes y tercer mes) se observó una reducción gradual de los valores, lo que se traduce en una mejora significativa de la cicatrización y la reducción del dolor. La cicatrización no se produjo sólo en el 35% (n=7) de los casos.

Conclusión:

La ozonoterapia mejoró la cicatrización de las heridas y redujo los niveles de dolor asociados. Sin embargo, dado el pequeño tamaño de la muestra, es necesario replicar el estudio en muestras más grandes y con entidades nosológicas diversificadas para validar los beneficios de esta intervención terapéutica.

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