Introducción:

Las caídas domiciliarias en ancianos representan un grave problema de salud pública, provocando una importante morbimortalidad.

Objetivos:

Evaluar el riesgo de caídas en el hogar entre los ancianos inscritos en los Centros de Día; identificar variables sociodemográficas, clínicas y habitacionales relacionadas con el riesgo de caídas en el hogar.

Métodos:

Estudio analítico transversal. La recogida de datos se realizó de forma anónima, compuesta por variables sociodemográficas, clínicas y relacionadas con las caídas y la Escala de Evaluación del Riesgo de Caídas en el Hogar.

Resultados:

La muestra estuvo conformada por 54 ancianos, en su mayoría mujeres (n = 28; 51,9%), con una edad media de 80,81 ± 7,9 años. Aproximadamente una quinta parte de la muestra (n = 12; 22,2%) informó que ya había tenido una caída, el 83,3% (n = 10) mencionó que había ocurrido en los últimos 12 meses. El mayor número de caídas se produjo en el dormitorio y en la calle. Los principales motivos de las caídas fueron mareos / desequilibrio / accidente cerebrovascular (n=6; 50,0%) y tropiezos (n=4; 33,3%). Solo las alteraciones auditivas y la edad> 80 años se asociaron con el riesgo de caídas en el patio trasero (OR = 2,86; IC del 95%: 1,08-7,57; OR = 1,84; IC del 95%: 1,02-3,31, respectivamente). La edad también se asoció con el riesgo de caer en los baños. El dormitorio (n=24; 44,4%) y el patio trasero (n=11; 37,9%) son las zonas de la casa con mayor riesgo de caída.

Conclusión:

Los resultados mostraron que alrededor de una quinta parte de la población ya había tenido un episodio de caída. Los cambios de audición y la edad> 80 años están asociados con el riesgo de caerse en el patio trasero. Se concluyó que la prevención de caídas en ancianos debe ser una prioridad para la planificación de la salud, con el objetivo de empoderar a los ancianos y cuidadores de las consecuencias nocivas que una caída puede ocasionar.

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